En el mercado actual se pueden encontrar dispositivos que son muy útiles para los profesionales y para los usuarios que pretenden realizar una gestión de la corriente eléctrica. Uno de esos dispositivos son las pinzas amperimétricas, que, por otro lado, son uno de los artefactos más completos que hay. Además, están disponibles por un precio muy asequible.
Para definir qué es una pinza amperimétrica hay que tener en cuenta que se trata de un instrumento de medición eléctrica que mide la corriente y la tensión y que combina dos elementos, uno de ellos es un multímetro digital y otro un sensor de corriente. Estos rasgos determinan que las pinzas amperimétricas sirven para registrar la tensión y las características de una corriente.
Uno de los elementos que destacan en este artefacto es su tenaza batiente que se coloca sobre un cable o sobre un alambre. El otro elemento de la pinza se coloca en cualquier lugar del dispositivo eléctrico para medir su corriente sin que sea necesario cortar la corriente que pasa por ese mismo circuito.
Por otro lado, en las pinzas amperimétricas llaman la atención dos características. La primera de ellas es que son seguras y evitan procesos como cortar cables o colocar medidores de prueba en los circuitos. Además, son cómodas y eficientes. Finalmente, es importante destacar que, aunque estas pinzas están disponibles para cualquier persona, lo más recomendable es que sean utilizadas por profesionales.
Otro aspecto que llama la atención es que hay tres tipos de pinzas amperimétricas, una de ellas son las de transformador de corriente que solo miden la corriente alterna, las del efecto hall que miden corriente continua y alterna y las flexibles que también contabilizan ambos registros.
El proceso general para usar la pinza amperimétrica se basa en utilizar el selector giratorio que se encuentra en el dispositivo y que sirve para ajustar la propia pinza. También hay que contrastar que el rango de dirección es el adecuado. Después hay que abrir las mordazas de la pinza y colocarlas alrededor del cable que tiene la corriente que se va a medir, y finalmente, hay que observar la lectura que aparece en la pantalla.
La pinza amperimétrica tiene como base de funcionamiento los principios del electromagnetismo. En primer lugar, hay que tener en cuenta que dentro de las pinzas hay una coraza de metal de ferrita. Este elemento mide el campo magnético de la corriente que circula por un conductor.
En este proceso también aparece un transformador de corriente que reconoce las fluctuaciones del campo magnético aportando una cifra de corriente alterna que se muestra en la pantalla. Por otro lado, las pinzas que tienen polaridad pueden medir la corriente continua.
También destaca el hecho de que las pinzas amperimétricas no dejan de evolucionar y actualmente algunas de ellas pueden efectuar las mismas funciones que un multímetro. Eso hace que capten medidas de voltaje, resistencia o capacidad. Además, es posible conectarlas a unas sondas.
A pesar de que estas funciones son propias de un multímetro, la diferencia con este dispositivo se localiza en que para realizar la medición hay que colocar el cable que se quiere medir en el interior de la pinza sin necesidad de abrir el circuito.
El procedimiento que hay que seguir para medir con una pinza amperimétrica comienza con una verificación del estado del dispositivo revisando todos sus elementos. A partir de ahí, hay que dar una serie de pasos.
Al hablar sobre la pinza amperimétrica y qué es, aparecen diferentes aspectos positivos entre los que destacan tomar medidas para anticiparse a fenómenos como las bajadas de tensión eléctrica, aunque también hay algunas desventajas que también hay que tener en cuenta. Como ventajas destacan los siguientes puntos.
Como inconvenientes del uso de estas pinzas destaca que su alcance tiene ciertas limitaciones que aparecen al medir cifras altas de amperios. Por otro lado, su actividad también puede verse afectada por las interferencias electromagnéticas y su coste es muy alto.